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Se aminala rosas estrafalarias,
del poder que todo lo siesga,
bien venidos a la cúpula del placer
donde toda coincidencia es duradera,
ven a donde el goce es eterno,
te trasportare a una supernova,
hasta allí te llevare, hasta allí tan lejos,
no amaremos todas las noches
hasta que nuestro cuerpos exploten,
al igual que ella, 
Supernova en el firmamento
te llevare agarrado de mi mano,
viviremos eternamente allí en los ejes del cielo,
admirados todas las noches por esos humanos,
que nos observaran desnudándonos,
danzando y acariciando nuestros cuerpos,
solo nosotros nos sentiremos en nuestro goce,
solo nosotros,
eternamente, eternamente,
ámame pequeña niña,
eternamente.
Somos ya Leyenda que envidian los enamorados,
somos ya,
eternamente,
eternamente,
enamorados.

Mi pequeña niña,
somos dos seres, enamorados, enamorados…